martes, 6 de mayo de 2014

LOS NUEVOS JINETES DEL APOCALIPSIS

I - LA GLOBALIZACIÓN

Antonio Campillo Ruiz

R. Reynaldo 

   Siempre hemos creído que los cuatro Jinetes del Apocalipsis son:
  
El Hambre
La Guerra
La Peste
La Muerte
  
   En el momento actual se encuentran en plena vigencia pero a ellos, creo que debemos añadir aquellos jinetes que cabalgan sobre la sociedad actual a lomos de corceles briosos que atropellan todo cuanto se interpone en su camino. Adelantándose unos a otros y sin orden, cabalgan unidos a los que perduran todavía:
  
LA GLOBALIZACIÓN
EL MIEDO
LA EMIGRACIÓN
LA INDIGNIDAD
  
   El derecho a la independencia, el derecho a la soberanía, es hoy un lujo de los países poderosos, de los países ricos. Cuando los países pobres ejercen el patriotismo se convierte en populismo o peor todavía, en terrorismo y constituye una amenaza para el mundo. El pueblo, los habitantes de cualquier región, no tienen derecho a defenderse, solo tienen el derecho de aceptar lo que otros deciden por ellos. Estos otros son los que deciden el gobierno mundial. La principal premisa de estos dueños permanentes de todo es su invisibilidad. No están sometidos a ningún control social, parlamentario o sindical, son personas en la sombra que detentan el gobierno del mundo. Detrás de los Estados, detrás de las organizaciones internacionales existe una oligarquía de muy pocas personas pero que cuentan con una potencia, una influencia, un control social sobre la Humanidad como jamás un Papa, un emperador, ni rey  alguno, han tenido a lo largo de la historia de los hombres. Poseen la extraña cualidad de destruir todo lo que tocan o los lugares en donde aplican sus teorías.


   ¿Quiénes son estos destructores masivos y, por tanto asesinos en serie? Debían de estar presos pero sucede que no se pueden cuestionar ni apresar porque ellos poseen las llaves de todas las cárceles y además, conforman un sistema, un sistema universal de poder que ha convertido al mundo en un manicomio y en un matadero. Al cabo de cuatro décadas de guerra fría, el combate entre las utopías capitalista y comunista se saldó con el desmoronamiento del bloque comunista y la confrontación político militar entre el este y el oeste fue reemplazada por una profunda división económica entre el norte y el sur. Desde la caída del muro de Berlín, las fronteras internacionales ya no separan sistemas políticos o modelos sociales opuestos, sino a naciones enriquecidas y pueblos empobrecidos. El actual telón de acero está en las barreras que contienen a los emigrantes como infranqueables puertas de un norte opulento gracias a la explotación del sur.


   Un orden mundial tan rígido como el anterior se ha establecido bajo el control de todopoderosos grupos internacionales del capital. Un sistema universal de poder donde las directrices del neoliberalismo como ideología, ha encontrado su principal enemigo en una devastadora violencia terrorista. Un modelo extremadamente injusto en el que desaparecen los viejos sueños políticos  y cuyo análisis resulta urgente: El Estado tal como lo conocemos, el estado nacional que surgió de la revolución francesa en el siglo XVIII, de la unificación de los diferentes países europeos, es un estado territorial. Sus leyes dejan de tener efecto más allá de las fronteras, así como su policía y su constitución. Su gran poder de legislar está limitado por el territorio, Sin embargo, los amos del mundo, los amos del capital financiero mundializado son totalmente independientes de cualquier forma de territorio porque en el proceso de creación del mercado globalizado, de unificación del mundo bajo la ley del máximo beneficio, uno de los tipos de capital se ha independizado: el capital financiero.



   El capital virtual, el capital líquido, el capital móvil, que se hace visible y toma cuerpo en las bolsas y que domina al capital comercial, al capital industrial, al capital social en todas sus formas. En la bolsa, cuando cierra Tokio, abren Frankfurt, Madrid, París y Londres y cuando las bolsas europeas cierran toman el relevo New York y Chicago. Por lo tanto, el capital financiero recorre el planeta las veinticuatro horas del día con una única finalidad: el beneficio máximo. Los mismos dirigentes de las multinacionales financieras que dominan todo tipo de inversiones en agricultura, energía o cualquier otra forma de explotación de recursos, pertenecen al entramado del gobierno de EEUU y otros países poderosos. La globalización es una inmensa mentira. 


8 comentarios:

  1. Felicito esta entrada tuya, valiente y veraz.... "Los Nuevos Jinetes del Apocalipsis! ¡ genial!,
    "Quiero ser dueño de nada y controlarlo todo. La competencia es un pecado" dijo John D.Rockefeller.
    Debemos para esta "altura del partido" que el verdadero gobierno del mundo es el Council on Foreign Relations y es una realidad......... y encima, muy enigmático, él....
    Un saludo afectuoso, amigo Antonio.

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  2. "donde dije digo, digo diego"....

    "debemos saber a esta "altura del partido" que el verdadero gobierno del mundo...... " Saludos

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  3. Para reflexionar, este tema que nos traes Antonio, acabas diciendo que la globalización es una inmensa mentira
    habriamos que matizar un poco, no? para mi hay aspectos evidentes de globalización como la cultura por decir uno, aquí también tendríamos que hablar de Internet, las redes nuestro servicio particular es un arma muy a tener en cuenta y que no acabamos de saber utilizarla para presionar a las multinacionales, que no tanto a los intocables, como bien dices al principio sobre los cuatro jinetes, la muerte, creo que paradojicamente es nuestra aliada ya que con justicia a todos nos trata por igual
    Un abrazo

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  4. !Hola,Antonio!

    Deberían ayudar a los países más pobres y en peores condiciones , acelerando su crecimiento económico y de esta forma intentar reducir la pobreza. Creo que es la mejor manera de que todos los países se beneficiaran de la globalización.

    Me ha gustado mucho.Muchos besitos.

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  5. Buena, sensible y valiente reflexión, Antonio. Das en la diana: los amos del mundo son los grandes del dinero, unos pocos pero verdaderos mandamases, los que gobiernan a los gobernantes. Y así, ¿quién le pone el cascabel al gato?
    Un abrazo.

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  6. De un plumazo, tu gráfico describe la situación a la perfección, incluidos los Protocolos.
    Saludos.

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  7. Una gran y oculta, dictadura, maestro Campillo. La esencia de la,Globalización no era esa, nos engañaron pero que mas da, nunca podemos hacer nada ¿Verdad?

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  8. Creo que has hecho una descripción excelente. Me encanta tu sinceridad y lo bien que expones los temas, siempre tan interesantes.

    Un fuerte abrazo..

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