María Luisa Arnaiz Sánchez
San Sebastián atendido
por Santa Irene y su criada,
Dirck van Baburen (atribuido), c. 1615
Del siglo XVI al
XVII hubo un cambio en la imaginería de san Sebastián, el santo que
ocupó el lugar de Apolo y del mítico Adonis llorado por Afrodita. Si en el
Renacimiento su imagen sirvió como pretexto para pintar desnudos masculinos, dando
salida a las pulsiones de algunos artistas, en el Barroco ganó terreno la
leyenda hagiográfica de Irene, una viuda compasiva, y
fue representado por lo general acompañado de la luego santa y su criada en una composición
triangular estable, salvo excepciones como la inestable del cuadro que abre la página. ¿Qué llevó a la modificación iconográfica?, ¿se la incitó a propósito? El hecho es que la Iglesia católica aprovechó
el renovado motivo para difundir su idea de caridad.
San Sebastián cuidado
por Santa Irene y su criada,
Hendrick
Terbrugghen, 1625
San Sebastián atendido
por Santa Irene a la luz de una linterna,
George de La Tour , 1630
San
Sebastián curado por Santa Irene y una esclava,
Matthias Stomer, 1640-50
Saint Sébastien soigné
par Sainte Irène, Antonio Zanchi
San Sebastián curado
por Santa Irene, Antonio de Bellis
San Sebastián atendido
por Santa Irene y su criada, Ribera
San Sebastián atendido
por Santa Irene, Antonio Belluc
Lindas imagens!
ResponderEliminarExcelente texto.
Um grande bj querida amiga
Sempre um prazer aprender contigo.
Es un placer pasar por vuestro blog . Lecturas instructivas y refrescantes en medio de tanta debacle. Un abrazo
ResponderEliminargreat blog
ResponderEliminarme encanta haberte encontrado
Y qué desagradecido fué... Después de que Santa Irene le salvara la vida y él volviera a ser martirizado, se le apareció en sueños a otra mujer (no recuerdo ahora qué santa era) para revelarle dónde estaba su cuerpo... Así que el éxito de descubrirlo y darle sepultura y el honor y gloria que eso supuso, se los regaló a otra persona. ¡Hombres! Ja, ja. Los cuadros son preciosos.
ResponderEliminarUn abrazo muy fuerte.
Desde luego que la composición de las imágenes es excelente.
ResponderEliminarUn abrazo, Gisa.
Supongo que cada uno se identifica con aquello que elige y, con la que está cayendo, más vale buscar paraísos.
ResponderEliminarBesos, Mariano.
Hola MuCha: tanto Antonio como yo también te hemos encontrado.
ResponderEliminarSaludos cordiales.
¿Cómo te fue el sábado, Isabel? Espero que estés contenta.
ResponderEliminarMuchas de las historias edificantes son creaciones interesadas y, aunque esta fuera real, critico a quienes se aprovechan de la ingenuidad.
gracias por compartir este excelente trabajo de investigacion. muy esclarecedor de lo ue es nuestra identidad y patrimonio cultural
ResponderEliminar