Las
relaciones peligrosas
Antonio Campillo Ruiz
Suena como libertad,
Danatella
No es la soledad la
mejor compañera para salir de la soledad pero, a veces, sólo por la soledad se
deja de estar solo. El barullo siempre es una indelicadeza consigo mismo. La
compañía inconveniente es la compañía molesta, aunque no se perciba hasta que
no pasa algún tiempo. No importa la edad, ni el sexo, ni la belleza para la
conveniencia. La inconveniencia puede provocarse por mil motivos que se resumen
en uno: la falta de coherencia personal.
Los habitantes de la casa habían vivido momentos felices, sabedores de la compañía enriquecedora y satisfactoria. Por eso, cuando la coherencia vuelve esporádicamente a sus vidas, saben apreciarla.
Pero no se habla ahora de las compañías convenientes, sino de las inconvenientes, que no suelen en su llegada descubrirse como tales, sino que se declaran por sorpresa, como una revelación, como un grito de fuera que llegase. Luego se manifiestan los misterios y muchas verdades, o todas, aunque la razón reafirme la intuición repentina.
Los habitantes de la casa habían vivido momentos felices, sabedores de la compañía enriquecedora y satisfactoria. Por eso, cuando la coherencia vuelve esporádicamente a sus vidas, saben apreciarla.
Pero no se habla ahora de las compañías convenientes, sino de las inconvenientes, que no suelen en su llegada descubrirse como tales, sino que se declaran por sorpresa, como una revelación, como un grito de fuera que llegase. Luego se manifiestan los misterios y muchas verdades, o todas, aunque la razón reafirme la intuición repentina.
Jorge Urrutia
La falta de coherencia lleva a todo tipo de tropiezos. Qué interesante texto, buscaré mucho más de él.
ResponderEliminarAbrazo!
Bello texto y preciosa imagen donde puede estar sentada la soledad conveniente, pero también la inconveniente. Siempre pienso que no hay mayor soledad que la que un@ siente rodead@ de gente y la soledad buscada la más agradable de las compañías.
ResponderEliminarBesos y feliz semana.
Muy hermosa la imagen.
ResponderEliminarUn sabio texto para reflexionar sobre la soledad.
Estupendo, querido Antonio.
Un beso.
Quizá aquí se encierra aquello tan extendido de que "más vale solo que mal acompañado". Y es que no es conveniente forzar las relaciones ni convivir con quien no admite la necesidad cotidiana de soledad que precisa todo humano.
ResponderEliminarUn beso, querido Antonio.
Estamos de acuerdo, decir que hay momentos en que necesitamos estar solos, pero no por estar solos,sino para pensar, analizar, meditar en ausencia de ruidos, oírnos a nosotros mismos, hacer examen de conciencia, todo eso es la esencia de la soledad; porque luego sabemos que necesitamos de los demás para encontrarnos reflejados en ellos y debemos despertar y vivir
ResponderEliminarUn abrazo tocayo
Soledad y compañía, todo en conjunto es necesario.
ResponderEliminarUn beso Antonio
Acertado momento, amigo Antonio para esta bloguería. Ay, amigo mío, hay tanto y tanta, que la soledad es ya el partido mas votado. Mi madre siempre me decía que no podía entender por que la gente se aburría tanto y luego, seguía leyendo y leyéndome ... Feliz noche.
ResponderEliminarA veces hay tanto ruido ahí fuera que es preferible estar solo. La soledad elegida puede ser un bendición lo malo es cuando no hay alternativa.
ResponderEliminarUn abrazo.