UNA
MENTE ARDIENTE EN BÚSQUEDA PERMANENTE
Antonio Campillo Ruiz
Debe
ser muy difícil poseer una mente en permanente combustión irracional mientras
se disimula por medio de un carácter duro y sosegado la felicidad que jamás se
llega a alcanzar, que arde sin sentido y consume la claridad de pensamiento, las denominadas buenas costumbres, la
prudencia o la castidad, dominada por un sexo reprimido e irreprimible. Debe
ser un bullicio interior que cambia la personalidad de quien se ve envuelto en
este laberinto, sin posibilidad alguna de encontrar la salida, excepto derivaciones
que son el espejo de su interior. En “Mademoiselle” de Tony Richardson, 1966,
este transformismo bipolar fue lanzado con la precisión de Jean Genet, creador de la
historia y excelentemente guionizado por Marguerite Duras, hacia los pequeños
grupos provincianos que establecen su propia moral, plagada de prejuicios e hipocresía.
“Mademoiselle” es un un primoroso
cuento cruel en el que apreciamos el estilo analítico de Marguerite Duras, llevando
al espectador a introducirse en los abismos de la mente humana. Un profundo
análisis que muestra la autocorrección de nuestros deseos y cómo esta crea un
nuevo ser que ya no es humano. A pesar de ello, se aprecia una desesperada
búsqueda de la felicidad, que jamás se ha conseguido a través del esfuerzo
realizado y que se aprecia con demasiada facilidad fílmica, a veces. Un duro corsé, en el que predomina la corrección
castradora de ritos y políticas de gran oscurantismo para estas gentes,
perfectamente retratadas e interpretada, aprieta en su mundo especial y
diferente sin tener en cuenta que solo obtienen respuestas desde su trabajo y
sus cosechas.
Tony
Richardson es una pieza más en este juego de incomprensión y maldita
crueldad. Coloca la cámara en los puntos exactos y a distancias determinadas
para que cinematográficamente expresen una realidad fílmica de un solo vistazo.
Todo está en su sitio y todo nos explica con inmediatez cómo se vive, cómo se
percibe algo tan difícil de expresar: el mal. David Watkin aporta una
fotografía que no solo proporciona energía a la narración sino que la dota de
unos claroscuros ensuciados o nítidos que proporcionan unas imágenes poderosas
y memorables. Ambos llevan hasta las últimas y pequeñas consecuencias las anotaciones
del guión de Marguerite Duras. Por ello, el análisis que el espectador realiza
de la psicología y la moral de “Mademoiselle”,
Jeanne
Moreau, es tan analítico y fílmicamente perfecto. Son memorables los planos de los espejos de tocador, el simbolismo de la serpiente, los primerísimos primeros planos del inicio de la película y otros muchos, así como secuencias completas como la procesión rogatoria, etc.
A la
vez, el espectador capta inmediatamente la ambigüedad y la abstracta complejidad
con la que ha vivido durante toda su juventud y madurez, esta convecina culta y
querida por todos. En el Festival de Cannes de 1966 tuvo detractores por la
sencillez de interpretación fílmica, facilitada por el equipo técnico de rodaje.
A la vez, fue nominada a la Palma de Oro como Mejor Película. El descubrimiento
de esta obra del Séptimo Arte nos muestra una realidad que acaba con uno de
esos desenlaces que siempre serán recordados.
Es importante visionar la película a plena pantalla.
Grandiosa pelicula parece
ResponderEliminarMe atrapó solo el titulo
Me siento identificada
Esta noche a solas conmigo la veré lentamente
me encanta la actriz de una belleza diferente.
Eliminar¿Sabes si hay alguna version nueva?
gracias
Otra gran recomendación de las tuyas, como siempre con la excelente introducción que nos dedicas sobre el film. Muchas gracias por este trabajo que te estás tomando, sé que andas con poco tiempo, así que los visitantes te "de tu cine", te lo agradecemos, Antonio. Un fuerte abrazo amigo.
ResponderEliminarHe visto “Un toque de canela” paladeándola. Qué crónica tan sentida de un tiempo feroz, qué elegancia mostrando unos sentimientos de desarraigo que podían haber caído en la astracanada. La luz y el tempo, tan conseguidos. Con tu permiso tomaré una escena para un próximo post.
ResponderEliminarA la propuesta actual le tengo ganas. Moreu es una actriz de la que he visto poco y me ha dejado con ganas, siempre me ha parecido singular. De Richardson me gusta todo, así que espero lo mejor.
El resto de tus propuestas, todas interesantes, están en espera e irán cayendo.
Buena selección, querido amigo.
Un peliculón, maestro Campillo. Esta noche ya tengo, gracias a ti, cine. Ted lo voy a subir a meneame, (si me dejan), para disfrute de otros miles.
ResponderEliminarLo he subido a meneame y, ya ves, en menos de un minuto 10 clics, maestro Campillo. Esta noche habrá cine para todos.
ResponderEliminarhttp://www.meneame.net/story/laberinto-cruel-mente-ardiente-busqueda-permanente
Seguro que es una gran película. Excelente actriz.
ResponderEliminarUn abrazo grande, querido Antonio.