CARABELUSA PORTUGUESA
Antonio Campillo Ruiz
Physalia physalis
Camufla su potencial peligro bajo un atractivo aspecto de globo de colores brillantes: azul, violeta o rosa iridiscentes. Posee un tamaño máximo de quince centímetros y, aunque permanece en la superficie, bajo el agua esconde unos tentáculos urticantes de hasta 30 centímetros de longitud. ¿De qué hablamos? De la temida “carabela portuguesa”. Esta especie, propia del Atlántico, entra por el Estrecho de Gibraltar al Mediterráneo si las corrientes le son favorables.
Colonias flotantes
En realidad, no se trata de una medusa sino de un organismo de los llamados “sifonóforos” (siphonophora), del orden de los “cnidarios hidrozoos” que forma colonias flotantes. Sus múltiples individuos o zooides presentan formas y estructuras diferentes según la función que les toque desempeñar: unos se encargan de la alimentación, ‘gastrozoides’, otros de la defensa, ‘dactilozoides’, y otros de la reproducción, ‘gonozoides’.
Vejiga flotante
Constituye uno de los grupos más comunes del holoplacton y puede flotar porque su vejiga está llena de gas, ‘neumatóforo’, ‘que lleva aire’; es depredadora y está armada de células urticantes llenas de una toxina que libera al ser rozada incluso fuera del agua. Es gelatinosa y pica. “Puede llegar a darse el caso excepcional de que en determinadas personas que hayan desarrollado respuestas de tipo alérgico extremas se presenten complicaciones más serias, pero en cien años se han registrado sólo cuatro muertes en todo el mundo frente a 200.000 picaduras”, en palabras de Ignacio Franco, investigador del Centro Oceanográfico de Murcia.
Su aspecto es muy atractivo
“Es fácil distinguirlas porque o flotan en superficie, o están en la arena, pero no sumergidas; el aspecto es inconfundible, de globo hinchado”, recuerda el experto.
Varada en una playa de Tenerife
Es muy poco probable que la 'carabela portuguesa' se reproduzca en el Mediterráneo, por el contrario se ha constatado que “es casi seguro que terminen muriendo sin reproducirse porque precisan otras condiciones”. En cualquier caso, “hasta ahora su reproducción en el Mediterráneo nunca ha ocurrido, pero con el cambio climático no podemos desechar del todo esa hipótesis”. Este es el criterio que se sostiene en el Centro Oceanográfico de Murcia.
Río contaminado
Ignacio Franco apenas concede importancia a la temperatura de las aguas marinas como factor que coopere en la masiva invasión de medusas, dado que “en todos los mares, tanto en las especies de aguas frías como en las de aguas calientes” se ha comprobado la subida de algunos grados. La proliferación de las medusas es un fenómeno que en su opinión “responde principalmente a problemas de contaminación orgánica”. Las precipitaciones y el consecuente aumento de caudal en las desembocaduras de los ríos frenaría la llegada de medusas a la costa ya que se establecería un “efecto de barrera invisible” por la diferencia de salinidad. Ahora bien, las aguas dulces que llegasen al mar no deberían contener la enorme cantidad de materia orgánica que en el momento actual se encuentra diluida en ellas.
River whale garden
¿Cómo se podrían limpiar los ríos y contener la proliferación de medusas al unísono según la teoría anterior? La materialización de una limpieza eficaz y profunda de los ríos no sería posible para los ríos europeos ni siquiera empleando a mil millones de personas.
River whale garden depurando un río
La aplicación de nuevas tecnologías ha aportado el diseño del “River whale garden” o “Jardín-ballena de río” en junio de 2010. La “ballena” es un proyecto de Vincent Callebaut. Este ingenio podría conseguir la limpieza y purificación de la materia orgánica de los ríos europeos ya que está diseñado para navegar por ellos con esa finalidad. Es un enorme jardín flotante con cuatro jardines interiores dedicados a los elementos clásicos: la Tierra, el Agua, el Viento y el Fuego. Asimismo, es completamente autosuficiente y está cubierto por paneles solares, con los que producir energía. Aplíquese y los ecosistemas seguirán manteniéndose miles y miles de años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario