Antonio Campillo Ruiz
El ángel herido, Hugo Simberg
Una dama de calidad se enamoró con tanto frenesí de un tal señor Dodd, predicador puritano, que rogó a su marido que les permitiera usar de la cama para procrear un ángel o un santo; pero, concedida la venia, el parto fue normal.
William Drummod
Es que el santo era el marido.
ResponderEliminarJajaja, buenísimo.
ResponderEliminarLa pintura, preciosa.
Un abrazo, Antonio.
Muito bom! Muito imaginativa a dama!
ResponderEliminarUm bj
Si, si, angel o santo...
ResponderEliminarMuy bueno este cuento, me sacó sonrisas.
ResponderEliminarPero la moraleja que saco del mismo es la siguiente ... como en la vida misma... hay personas tan diferentes, y los hay tan tan nobles, tan bondadosas, y humildes de corazón, que pueden pecar hasta de -y perdona por el calificativo que no me gusta pero no encuentro otro- de tontos, y otros, puede que sean demasiado listos.
Gracias por compartir tus entradas.
Besos.
Eso es el arte de la síntesis. Genial.
ResponderEliminarSí amando, y la santa por aguantar su plática desde el púlpito, la mujer.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Isabel, el primer niño no lleva un disfraz de cura. ¿eh?. Era su ropa de los domingos para oír el sermón del pastor.
ResponderEliminarCierto, es una pintura muy belle.
Un fuerte abrazo.
Sí, Gisa, la señora poseía una imaginación angelical.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
¡Ahí es ná, Mariano! Una sola virtud no, DOS. ¿Como tuvo que "sentir la concepción" la buena señora?
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, Mariano.
Sí, Carla, la bondad, la puritana y excesiva benevolencia, pueden ser interpretadas como una anomalía.
ResponderEliminarSu mente debía estar llena de los altisonantes dones del cielo y sus habitantes.
Desde luego el predicador era demasiado listo.
Un fuerte abrazo, Carla.
Que creo, Enrique, que es verdaderamente difícil conseguirlo con la calidad de William Drummond.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Eso de "una dama de calidad" me ha encantado...y el marido en Babia.
ResponderEliminarUn acierto traernos estas citas.
Un abrazo.
Thornton, estamos de acuerdo: es una definición de la dama estupenda, pero..., ¡no te pierdas "frenesí"!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.