INTERPRETACIÓN
PERSONAL
Antonio
Campillo Ruiz
A Patzy
Convencionalismos
admitidos como señas de identidad de las cualidades que debe poseer la belleza no pueden ser generalizados, debido a la subjetividad con la que es apreciada. En
muchas ocasiones, tratamos de percibirla en una secuencia que podría llegar a ser,
de unas a otras personas, tan irreconocible como difícil de disfrutar. Matices
relacionados con experiencias previas, conocimiento de aspectos y detalles
particulares de aquello que se aprecia y, en muchos casos, los defectos
fisiológicos que pueden alterar el estado perceptivo del receptor, lo pueden
guiar por el falso camino de un simplismo o una hipersensibilidad que, en sus
extremos, siempre conducen a pérdidas de conciencia real de la escala de la
belleza.
A ello debemos
añadir el inmediato aprecio o desprecio por aquello que percibimos como
gratificante o nos desagrada. Nos erigimos inmediatamente en los paladines de
una u otra opción sin considerar en primer lugar lo que supone la contemplación
de aspectos que siempre, siempre, poseen unas estampas no reconocidas o valoradas
como bellas. En una y otra ocasión presuponemos que apreciar de forma contraria
a la propia, algún aspecto determinado indica una grave falta de atención, ausencia
de conocimientos o simplemente desgana. En general, somos tan beligerantes y contundentes
que nuestra opinión queda envuelta en una informe masa de saber asistematizado
y sin sentido. Cuando lo que admiramos es obra del hombre, ambas apreciaciones
nunca son adecuadas y, con mucha frecuencia, son fácilmente manipuladas por
quienes tienen en cuenta esta dispar apreciación de la obra que se ha
realizado. Unos y otros son introducidos, sin percatarse de ello, por
estudiosos de la percepción en mundos separados, en compartimentos que jamás se
pondrán en contacto y, por tanto, jamás intercambiarán ideas o pensamientos
que, aún siendo contrarios, pueden ser válidos para ambas partes. Este es el
objetivo final de la manipulación, de la osadía de considerar a seres humanos
meros espectadores que reciben tal cual se dicta lo expresado como si fuese algún
aspecto de la belleza, siendo que, puede o no serlo.
Cuando la Naturaleza
es la que enseña su rostro, sin cambios que la hayan alterado, sin intereses
que supongan para ella manifestaciones de altivez o sumisión, sigue existiendo la
interpretación peculiar y subjetiva que se acrecienta en personas que la
aceptan o rechazan en función de aprendizajes singulares: errores de concepto,
interpretaciones favorables o desfavorables, enseñanzas sutilmente
malinterpretadas para beneficio de quienes las han alterado, etc. Y, en fin, si
la Naturaleza es fiel modelo de aquello que se presupone bello y el hombre lo
repite, la percepción da paso a la inmediata crítica, positiva o negativa, que
crea un estado de enfrentamiento silencioso, pertinaz y, con frecuencia,
demasiado inmaduro tanto para seguidores como detractores de la osadía de la
interpretación personal.
Es importante visionar el montaje a plena pantalla
El arte las cosas de la vida lo que tenes adentro lo que fluye de tus letras...
ResponderEliminarEs arte para leer
Siempre me sorprendes con lo grande lo de afuera...
ResponderEliminarme gusta tu blog mucho
Por supuesto, Antonio, como todos tus artículos, es muy interesante el tema que aquí planteas pero, en este caso en especial, debo agradecerte particularmente la dedicatoria personal que me has hecho, obviamente vinculada a la identificación de mi persona con Italia (objeto de todas tus bellas imágenes y del interés compartido). Sabes bien que ambos admiramos aquel país, sus secretos, historia, arte, cultura y costumbres, así que es un placer para mí haberte encontrado en este gran mundo de la red, y así disfrutar de tus conocimientos, de tus relatos, de tus viajes y de los tópicos con que siempre nos sorprendes. Es un honor! Muchísimas gracias, querido amigo. Y mi abrazo de siempre. Patzy
ResponderEliminarEstupendo tu video... los cánticos pusieron a mis perros a ladrarle, y a mi se me erizo la piel, jajaja. Me gustaría que admiráramos las particularidades de cada creación, sin patrones, armonias y cuanta cosa impuestos por no sé quién, y ahora con fotoshop y demás, ya sabes, todo milimétricamente cuidado. Me llama mucho la atención, el parecido con ciertos rasgos arquitectónicos y fisonómicos de los mayas. Para quienes los que hoy son "defectos" eran las cualidades, ya ves que los de la realeza hasta se creaban premeditadamente los que para nosotros son defectos. Otros patrones de belleza.
ResponderEliminarQué graciosas me parecieron las esculturas con pudor. Lindo que apreciaramos las cosas y la gente como son, sin poner ni quitar... pero, bueno la cirugía plástica ha sido un buen negocio desde el origen del hombre, me supongo, jajaja!
Abrazo!
¡Hola Antonio! Primero que todo debo agradecerte por tan bellas palabras en mi blog. Haces que una simple escritora aficionada se sienta con fe de seguir adelante. ¡Muchas gracias!
ResponderEliminarEn cuanto a la entrada que has subido entre tantas tan bellas que admiro siempre, te diré que estás en los cierto. La belleza es tan subjetiva y me alegro por ello. Sería un mundo aburrido si los seres humanos tuviéramos los mismo cánones como base. Las miradas son diferentes porque creo que van embebidos en estímulos diferentes, medio que lo rodea, cultura, historia, etc.
Muy interesante el post. Que es un placer visitarte no es ninguna noticia pero a veces es bueno reafirmarlo. ¡Te felicito! Un abrazo. Lou
Maravillosas realidades que solo tú nos aportas con riqueza, amigo Antonio. Gracias.
ResponderEliminarCada persona es un mundo y la belleza no tiene por qué ser lo que todo el mundo dice que es. Apreciamos a través de la mirada, pero ¿eso quiere decir que un ciego no lo puede hacer? Sí, a través del oído, del olfato, del sentido del tacto. Cada uno de los sentidos puede ofrecerte la idea de belleza. La luz y los matices también hacen que un objeto sea bello, y la sensibilidad de los ojos que lo miran, y el estado de ánimo, y la compañía, y la pareciación de cada una de sus calidades. Loq ue un día te puede parecer bello al día siguiente puede ser que no lo sea si te encuentras mal anímica o físicamente. A quién no le ha pasado que al ir a un lugar hermoso, por ejemplo durante un viaje, no se ha sentido enfermo y aborrecido ese sitio y no ha querido volver nunca más, aunque sea el más hermoso del mundo.
ResponderEliminarUn beso
Excelente el video.
ResponderEliminarCreo que cada persona tiene un concepto diferente de la belleza,
Tus entradas son siempre llenas de interés. Es un placer visitarte, querido amigo.
Un beso
La belleza o fealdad, son tan manipulables esos conceptos! Pero hay obras humanas o de origen natural ante las cuales es imposible contener el asombro de admiración. O que la simple visión ya produce goce.
ResponderEliminarHay que admirar a los artistas que abandonan los cánones de belleza establecidos porque ellos son los que amplían nuestros horizontes y libertad de expresión.
Un largo abrazo, querido Antonio.
El deleite que produce la belleza es inenarrable, y no siempre se puede describir, pero estas imágenes que has puesto, Antonio y tu forma de explicarlas me han producido paz.
ResponderEliminarEs una entrada magnífica.
Existen tantos conceptos de belleza, y su contrario, como personas -aunque hay ciertos cánones establecidos-
ResponderEliminarEs impresionante tu vídeo, Antonio.
Podemos inferir toda la influencia de esa cultura en la arquitectura occidental.
-Tengo necesariamente que agradecer tus comentarios (me acompañaron sin que lo sepas mientras muy lejos me hallaba en otros menesteres)
*En cuanto a la portada ,te enviaré los datos del Observatorio,al que tengo una visita programada...
Cariños.
Cada uno percibimos la belleza de distinta manera, aunque haya cánones registrados, pero como en todo hay quienes sacamos los pies del plato..
ResponderEliminarEl vídeo que maravilla.
Besosss
Siempre nos enriqueces en cada entrada. Pienso que la belleza está en los ojos del que mira. Aunque siempre lo autentico engrandece el espiritu contemplarlo. Un abrazo
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