jueves, 20 de julio de 2017

HILOS ENTRECRUZADOS

EL TELAR DE CINTURA MAYA

Antonio Campillo Ruiz


   Matemáticas, astronomía, arte, entre muchas otras ciencias descubiertas y aplicadas al cuerpo y el alma, alcanzaron en la Civilización Maya un desarrollo tan importante en el entorno de su asentamiento que de ella han estudiado y bebido, posteriormente, pueblos y culturas hasta la actualidad. De entre las técnicas empleadas recordamos los ricos vestidos bordados que utilizaban y, afortunadamente, continúan usando en la vida cotidiana mujeres y hombres.


   La tradicional técnica de tejido maya está basada en el telar de cintura, pieza sencilla formada por unos soportes, que son dos simples varas que sostienen la urdimbre, los hilos verticales, uno de los cuales se ata a un árbol o cualquier soporte fuerte y el otro, igualmente, desde sus extremos se ata a una ancha cinta que rodea la cintura de la tejedora. Así, la tejedora puede tensar la urdimbre para pasar la trama, hilos horizontales, según las necesidades del tejido que realiza. Con diversos tipos de agujas entreteje en la urdimbre los dibujos que diseña, de memoria, aprendidos de sus padres o representativos de los antiguos símbolos mayas.


   Utiliza una lanzadera, que usa con las manos, entrecruzada con la trama para ir formando la tela. Pasado el hilo de la lanzadera como sostén horizontal de la urdimbre, con el “chacoyo” o lizo, cambia la posición de los hilos y abre la calada, se atraviesa con la espada, palo más pesado y plano que se utiliza para abatanar la trama. Tras separar los hilos de la urdimbre en distintas cantidades y frecuencias, el paso de las agujas, de diverso grosor, van cruzando los hilos de la trama obteniéndose un tejido fuerte, conformado con los repetitivos golpes que da con la espada de madera para apretarlos y tensar la trama.


   La fortaleza de los tejidos es debida al tensado de urdimbre y trama, por ello, es imprescindible que la tejedora tense de forma homogénea el telar con su cintura durante todo el proceso de tejido de una pieza. Esto supone un esfuerzo adicional a la dura posición que debe adoptar la tejedora, de rodillas, sentada sobre sus piernas y sosteniendo el telar.



   La fibra común utilizada para los tejidos es el algodón, de excelente calidad en toda Guatemala y especialmente en la zona del altiplano, donde perduran multitud de tejedoras que mantienen la técnica de representar los dibujos ancestrales de sus antepasados y su simbología. Tintes naturales, minerales u orgánicos obtenidos de plantas, frutos o semillas son, igualmente, conseguidos utilizando los recursos naturales que fueron descubiertos, hace más de dos mil años, por la Civilización Maya. 


3 comentarios:

  1. Tus relatos, tu viaje, tus conclusiones, tus descripciones ... hacen que la lectura reposada de tus bloguerías sea un verdadero libro de "asuntos" para aprender a aprender.
    Un abrazo, amigo Antonio y, ya sabes, no dejes de escribir nunca

    ResponderEliminar
  2. ¡Cómo me gustan esos tejidos!

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  3. Qué maravilla de labores hacen estas tejedoras, pero la verdad, en mor de la tradición pienso que es excesivo mantener la dura tarea que debe ser para estas mujeres la elaboración de sus tejidos en tan incómoda posición. No?

    ResponderEliminar