YUPPIE

HISTORIA DE UN CARTEL

Antonio Campillo Ruiz

Old man, Van Gogh

   La cuestión no es que el marketing aumente los beneficios de un negocio, mediana empresa o multinacional, que indudablemente los aumenta, la cuestión es si se debe emplear a un asesor de imagen, creativo o promocionador de una campaña, vamos, un yuppie, para generar beneficios en un negocio como el presentado.

   No es seguro que el realizador haya querido exponer un chiste de humor negro o que se trate de un anuncio sobre la eficacia de la contratación de una persona con sólida formación en asesoría empresarial para cualquier tipo de negocio o pequeña empresa. A pesar de dividir la opinión del espectador, esta dicotomía se basa en uno de los sentimientos más peyorativos para el ser humano y, probablemente, más predicado por poderosos y religiosos: la conmiseración, la lástima, la compasión. 

   Con una planificación, puntos de vista y música correctos, el espectador no tiene más remedio que rendirse ante el lloro fácil, al apreciar que el jefe del negocio no sabe cómo llevarlo, es un analfabeto en técnicas modernas de mercado y comunicación y, por tanto, no obtiene beneficios para nuevas ampliaciones o reinversiones. En fin, creo que sería más sencillo pensar que es un chiste audiovisual poco graciosillo con premio incluido.